El control crucero o control de velocidad crucero es una función que permite mantener una velocidad constante sin necesidad de mantener el pie en el acelerador. Aunque es útil en carreteras largas y rectas, su uso bajo la lluvia podría representar un riesgo para la seguridad del conductor y los ocupantes del vehículo.
Durante la lluvia, el pavimento se vuelve más resbaloso debido al agua y los residuos que se acumulan en la superficie. Esta condición reduce significativamente la tracción de los neumáticos y aumenta el riesgo de hidroplaneo, una situación en la que el auto pierde contacto con el suelo y “flota” sobre la capa de agua.
Según la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras (NHTSA, por sus siglas en inglés), el uso del control crucero puede agravar esta situación, ya que el sistema mantiene una aceleración constante sin considerar el cambio en las condiciones del camino.
Cuando un vehículo comienza a hidroplanear y el control crucero está activado, el sistema puede interpretar la pérdida de velocidad como una necesidad de aumentar la aceleración. Esto empeora el deslizamiento y hace más difícil recuperar el control. En cambio, si el conductor tiene el control total del acelerador, puede reducir la velocidad de manera inmediata y segura, sin movimientos bruscos.
Además, en condiciones de lluvia intensa, la visibilidad también se ve comprometida. Esto exige reacciones más rápidas ante cualquier imprevisto, como un vehículo frenando de golpe o un charco profundo en el camino. El uso del control crucero limita la capacidad de respuesta, ya que el conductor no tiene un control completo e inmediato del acelerador.
No uses el control crucero bajo la lluvia
Los fabricantes de automóviles y expertos en seguridad vial recomiendan desactivar esta función en condiciones climáticas adversas. Algunos autos modernos incluso cuentan con sensores que limitan el uso del control crucero en caso de detectar lluvia o baja tracción, como medida preventiva.
Pese a que el control crucero es una herramienta útil para la conducción en carretera, no es recomendable utilizarlo cuando llueve, pues se requiere un control total del vehículo para reaccionar rápidamente ante cualquier situación. Lo más seguro es mantener una velocidad moderada, aumentar la distancia con otros vehículos y conducir con atención total al entorno.
