El uso de la bicicleta no sólo reduce los tiempos de traslado, sino que también ayuda a tener una mejor economía. Además al desplazarse en dos ruedas el ciclista mejora su condición física e incluso reduce el estrés o la ansiedad.
Usar una bicicleta como medio de transporte, de hecho, en el presente ya es más común, sobre todo porque este vehículo ha ido ganando terreno en distintas ciudades, donde cada vez se pueden ver más ciclovías.
Entonces, en caso de que algunas personas estén pensando en comprar una bicicleta para ir a sus trabajos o la escuela, aquí en De Cero a 100 damos a conocer qué cosas se necesita saber antes de adquirir una.
Te podría interesar
¿Qué necesito saber antes de comprar una bicicleta?
Antes de hacer la compra de un vehículo así, es necesario tener claro qué tipo de bicicleta se quiere tener. Entre las más recomendables para usarlas en la ciudad están las bicicletas de montaña, las bicicletas de ruta, las bicicletas híbridas o las bicicletas urbanas.
Uno de los puntos más importantes es saber elegir el tamaño del cuadro de la bicicleta, ya que de esto depende la comodidad que se va a tener al momento de pedalear. Por lo mismo se recomienda hacer la compra en lugares de confianza, donde haya gente especializada en las bicis.
Para mayor seguridad, también es importante saber elegir el material del cuadro. Por lo general, una bicicleta con cuadro de aluminio es de las mejores opciones; son ligeras y sus precios no son elevados, como lo pueden ser bicicletas con cuadros de carbono o titanio.
La bicicleta que se elija para recorrer la ciudad puede ser de una sola velocidad o con un sistema de cambios. No obstante, lo más recomendable es tener una bici con velocidades. También es buena idea que el vehículo de dos ruedas cuente con suspensión delantera para absorber impactos que se puedan presentar en el camino.
En cuanto a los frenos, estos podrían ser de disco o directos a la llanta. Los frenos de disco son más modernos y potentes al momento del frenado; pero en reparación pueden llegar a ser más costosos. En cambio, los frenos de llanta son ligeros y económicos; pero es necesario tomar en cuenta que en condiciones húmedas no responden tanto como los otros.
Las llantas de una bicicleta, también es algo que se debe tomar muy en cuenta. Sin embargo, esto depende del tipo de bicicleta que se elija. Los neumáticos de una bicicleta de montaña son más gruesos y con tacos porque son para todo tipo de terrenos. En cambio, las llantas de una bicicleta de ruta, híbrida o urbana pueden ser más delgadas y funcionan mejor en ciudad que en terracería.
Otro tema importante es la ergonomía, por lo que se recomienda saber elegir una bicicleta con un buen asiento, un manubrio que sea cómodo y que la posición de manejo sea la adecuada. En las bicicletas de ruta es posible tomar una posición de manejo más aerodinámica, mientras que en otro tipo de bicis la posición sería más erguida. No obstante, como ya lo comentamos antes, lo principal es saber elegir una bicicleta que sea de la medida exacta.
Ya por último, las personas que deciden comenzar a usar una bicicleta como medio de transporte, también deben tomar en cuenta que se harán gastos en accesorios, ya sea para una mejor seguridad y que los traslados sean más cómodos. Este tipo de gastos se podrían hacer en portaobjetos, luces, timbres, mochilas, cascos, etcétera.
Además, y quizá lo más importante, es probar la bicicleta antes de hacer la compra. En tiendas especializadas es común que uno pueda darse una vuelta.