No importa de que año sea tu ‘carrito’, traerlo limpio es muy importante, así que si estás pensando en darle un trato especial, te invitamos a que aproveches este fin de semana para tomarte unas cuantas horas para limpiarlo a profundidad y que se vea realmente increíble. Si quieres conocer algunos trucos para limpiar tu auto por dentro como un verdadero profesional, sigue leyendo.
Como nuevo
Es importante que consideres que aunque puedes llevarlo a un lava autos, el cariño y el cuidado que tú le vas a poner jamás se podrá comparar, así que si estás listo, ¡comenzamos!
Saca la basura y todo lo demás
Estamos tan acostumbrados a pasar tanto tiempo dentro de nuestros vehículos que se han convertido en una extensión de nuestros hogares, por lo tanto no es raro encontrar desde zapatos, hasta abrigos, botellas de agua, monedas, tickets de compra y basura por doquier.
El primer paso consiste en desocupar tu automóvil de todo aquello que te ‘estorbe’ para limpiarlo profundamente. Los tapetes, portavasos y todos los elementos removibles que formen parte de tu auto también deberán quitarse para obtener los mejores resultados posibles.
¡A sacudir!
Remover el polvo extra que se encuentra encima del tablero, volante, portavasos, asientos y otras superficies con un trapo será la mejor idea. Nuestra recomendación es que el paño esté seco para evitar embarrar las superficies con la mugre.
Para sacudir las alfombras puedes apoyarte de un cepillo con cerdas duras que ‘arrastre’ todo el polvo y los sedimentos que se quedan rezagados.
Hora de aspirar
Lo siguiente que nos queda por hacer es utilizar una aspiradora para recoger todo el polvo y los restos de basura. Existen algunas aspiradoras en el mercado que incluyen boquillas con diferentes tamaños y grosores, ideales para esos recovecos en los que es imposible limpiar de manera ‘normal’.
Tratamiento especial para tus asientos
Si las vestiduras de tu automóvil son de tela, en un atomizador te recomendamos poner un poco de jabón y desengrasante que deberás rociar en la superficie de los asientos, una vez hecho esto, con un cepillo deberás tallarlos de manera vigorosa.
Una vez que has terminado, con un trapo húmedo deberás retirar el exceso de jabón, y con un trapo seco quitarás la mayoría del agua en los asientos. Con la ayuda de tu aspiradora -a la que deberás retirarle el filtro previamente- es importante que quites el resto de humedad en los asientos.
El secado completo se dará una vez que termines y permitas que el sol haga su trabajo en las vestiduras. Solo bastan algunas horas para que estén completamente secos y sin ninguna mancha. Te recomendamos dejar abiertas las puertas y ventanas para que la tarea sea más sencilla.
En caso de que tus asientos sean de piel, deberás utilizar un jabón y/o desengrasante amable con este material. Para aplicarlo solo necesitas un atomizador. El jabón lo esparcirás con un trapo suave. Ya que los has ‘lavado’ es importante secarlos con un trapo de microfibra.
Existen algunos productos en el mercado especiales para darle brillo y protección a tus asientos, ayúdate de ellos para darles una apariencia reluciente.
¡Tapetes listos!
Como último recurso, te recomendamos que en caso de tener tapetes de plástico, estos los laves de manera normal con agua y con jabón. Si en cambio, estos son de tela, la recomendación, en caso de estar muy sucios, es que te apoyes de una manguera con agua a presión, que será ideal para remover todas las manchas de los mismos, y una vez finalizado, será importante dejarlos secar al sol durante algunas horas.
Lavado exterior
Ya que has dejado reluciente el interior, es necesario que hagas lo mismo con el exterior. Para esto necesitarás algún jabón para la carrocería y desengrasante para las llantas que deberás aplicar con ayuda de una esponja. Una vez hecho esto, deberás secar tu auto con un trapo absorbente; qué sencillo, ¿verdad?
Te recomendamos hacer este pequeño ‘ritual’ de limpieza una vez cada dos meses y te aseguramos que tu auto se verá siempre fabuloso.
