Hoy en día, los creadores de contenido buscan generar que sus publicaciones lleguen cada vez a más personas, y es por esta razón que muchos de ellos deciden cumplir retos o ser parte de hazañas que puede poner sus vidas en riesgo. Esto es exactamente lo que paso con Cheyenne Lord, el titular de un famoso canal en YouTube llamado Chiling with Chet, quien decidió hacer algunas “mejoras” a su automóvil, sin darse cuenta de lo peligroso de la situación.

Antes de explicar lo que paso con este influencer, es muy importante dejar en claro que estas hazañas son riesgosas y bajo ninguna circunstancia deben realizarse debido al peligro que pueden representar.

Un modificación que le salió muy cara

A pesar de tener a su disposición uno de los automóviles más rápidos de la actualidad, un Tesla Model S Plaid, Cheyenne Lord estaba buscando hacerlo el “Tesla más rápido del mundo”, ¿cómo lo iba a conseguir? Muy fácil, aligerando la unidad y modificando algunos elementos del mismo.

Fue así como decidió recortar algunas parte interiores como chapas de las puertas y otros elementos “innecesarios” para hacerlo más ligero y que su desempeño fuera mejor.

La cereza del pastel fue cuando reemplazó sus frenos por unos Unplugged Performance, además de agregar nuevos discos de cerámica y mangueras de freno de acero, todo esto con el único objetivo de aumentar la rapidez del eléctrico.

Para el día de la prueba, Cheyenne Lord estaba listo para romper un récord mundial, sin embargo, una serie de malas decisiones lo alcanzaron poniendo su vida en peligro, en primer lugar, el influencer se subió a su ‘Frankenstein’ sin ningún tipo de equipo de seguridad, una pésima idea cuando se quiere correr a altas velocidades.

Medios especializados concuerdan con que el equipo mínimo para este tipo de aventuras debe constar de un asiento especial, un casco y por supuesto un cinturón de 5 puntos que lo mantenga en su sitio.

Todo parecía perfecto hasta que al llegar a los 274 km/h, los frenos de Cheyenne Lord se calentaron demasiado como para resistir y este se estrelló contra una inmensa pared de neumáticos.

¿Qué fue lo que falló? Además de lo que parecería obvio, al momento de hacer las modificaciones que lo llevarían a convertirse en una leyenda, Cheyenne Lord olvidó un detalle crucial: cambiar el líquido de frenos de un DOT 3, que es el que regularmente usas los Tesla, a un DOT 4 indicado para cuando las exigencias del motor son mayores.

Aunque afortunadamente Cheyenne Lord salió con vida, esta hazaña le salió muy cara, pues además de haber deshecho su Tesla, el Youtuber terminó con 5 costillas rotas y una rodilla fracturada.

Un amante de la adrenalina

Esta no es la primera vez que el creador de contenido da de que hablar por sus experimentos, pues ya en 2 ocasiones pasadas, y con el mismo Tesla Model S Plaid, Cheyenne Lord intentó manejar debajo del agua, hazaña que le causo diversas afectaciones al vehículo.

A pesar de que por el momento el titular de Chilling with Chet se encuentra recuperándose, es muy probable que vuelva a hacer de las suyas; esperemos que a la próxima tenga más cuidado.