Volvo es una marca que se ha caracterizado a lo largo de sus años por ofrecer vehículos cómodos, lujosos, seguros y con grandes prestaciones; como toda marca, ha tenido que irse adaptando a los pasos agigantados que ha dado la industria automotriz, sobretodo aquellas marcas de origen asiático, especialmente chino, aunque ahora comparte algo con ellos.
¿Qué tal se maneja el Volvo EX-30 y qué se puede esperar de su equipamiento?
Manejamos el Volvo EX-30 por unos días, recorriendo autopista y ciudad, no te pierdas mi opinión personal al respecto.
No les voy a mentir, ¡el exterior de este Volvo es precioso! Me parece un acabado muy limpio y distintivo, es un vehículo que me da toda la sensación de que formaría parte del garage de Hailey Bieber, una de las modelos e influencers cuyo “clean look” ha robado las miradas de las redes.
Te podría interesar
Sus líneas minimalistas, así como sus colores variados y en tendencia, enamoran a cualquiera que siga la moda y el diseño, me tocó convivir con el EX-30 en color Cloud Blue, —mi favorito, he de admitir—, pues es una tonalidad divertida que bajo cielos nublados podría parecer blanco, pero es un azul claro muy coqueto.
He probado ya varios SUV eléctricos y he de decir que algo que me encantó de Volvo EX-30 es su autonomía y rendimiento, me dieron la versión “Single Motor Extended Range”, que tiene un rango de hasta 377 km con la carga al 100%, pero he decirles que no pierdes 20 km de electricidad con un solo arrancón, como me ha llegado a suceder con otros vehículos, tampoco sacrificas el sonido por querer ahorrar energía, que déjenme les digo que está buenísimo, pues es Harman Kardon Premium Sound.
Su consumo de energía es de 17.5 kWh/100 km, la carga en casa de esta versión es de ocho horas, en lo personal, yo la conecté en una agencia de Volvo, donde la carga es gratuita para usuarios de la marca.
Su velocidad máxima es de 180 km/h, va De Cero a 100 en 5.3 segundos, partiendo de esto, te comparto a continuación la sensación que tuve del manejo de esta camioneta sueca.
La aceleración es rápida y orgánica, sus frenos me encantaron por certeros, sin embargo al ir a buena velocidad en carretera se siente que cómo colea la parte trasera en curva, si no te pones listo, se te puede ir la camioneta, además de que la dirección me parece muy suave, pese a estar en el modo más firme que ofrece (lo puedes configurar), en ciudad, brinca demasiado en topes y baches, —incluso pasándolos a 7 km/h—.
Otros aspectos que me quedaron a deber, al menos de manera personal, es la calidad de los materiales interiores, que si bien comprendo y aplaudo el uso de textiles reciclados, pierde un poco la esencia de la imagen y sensación que daban los acabados de Volvo a finales de los 90’s y primera década de los 00’s.
Carece de manijas a los costados y de espejos de vanidad, y aunque llama mucho la atención su minimalismo interior, contrastado por la enorme pantalla de mano de 12.3", no me terminó de convencer que todos los datos se encuentren en ella, en el centro del tablero, teniendo que desviar demasiado la mirada para simplemente ver a qué velocidad vas.
Volvo Cars es propiedad del grupo chino Zhejiang Geely Holding desde 2010 y aunque me encantó el diseño exterior, la autonomía y la aceleración del EX-30, no puedo evitar pensar, ¿la calidad a la que estaba acostumbrada de esta marca sueca, se vio afectada por ahora pertenecer a un grupo chino?
Quizás estos interiores y sensación de conducción, los aplaudiría de una marca de origen chino, pero tratándose de Volvo, me dejó nostálgica por lo que solía ser, pero por 719,000 pesos y para darle un manejo más familiar, no tan competitivo, lo adquiriría.